¿Has llevado a la práctica alguna vez un análisis DAFO? ¿O, como muchos hemos hecho, te has quedado a la mitad del camino? Coge tus apuntes de hace un par de semanas, porque hoy vamos a trazar el plan maestro para dominar el mundo a través de la CAME (bueno, al menos empezaremos por tu organización)… Muahahahaaa…
Descifrando enigma
¿Conoces la historia de cómo los aliados ganaron la segunda guerra mundial? No, no me refiero al ataque a Pearl Harbor, decisivo para que Estados Unidos entrara en el conflicto.
La guerra, en realidad, se ganó desde una pintoresca mansión victoriana localizada en Buckinghamshire, Inglaterra. Bajo un absoluto secretismo, varias de las mentes criptógrafas más brillantes, trabajaron día y noche para romper el código de comunicación de los nazis. El héroe de esta historia fue un tímido inglés llamado Alan Turing, padre del primer ordenador moderno.
Gracias a su invención, una máquina de computación que necesitaba de un almacén entero (no apta para los escritorios de hoy en día), los aliados lograron descifrar el código Enigma. Este código, proporcionado por la máquina Enigma y cambiado cada pocas horas, procuraba a quien lo conociera una comunicación encriptada de todos los movimientos militares de los alemanes. ¡Imagina la alegría de Turing y sus compañeros cuando consiguieron descifrar ese código!
Sin embargo, la alegría duró poco. Grandes pensadores como eran, se dieron cuenta de que si los aliados atacaban de forma directa (estrategia ofensiva), los alemanes no tardarían en entender que su Enigma había sido descubierto. Y entonces reconfigurarían su máquina, echando por tierra todo el trabajo de Turing y sus compañeros.
Una decisión difícil
Tras un breve análisis de las circunstancias, decidieron que solo atacarían puntos estratégicos, dejando ganar a los alemanes algunas batallas. De esta forma, evitaron levantar sospechas y, según calcularon los historiadores tras el conflicto, se acortó la guerra entre dos y cuatro años, salvando millones de vidas en ambos bandos.
Parece contraintutivo, ¿verdad? Pero sopesando bien sus posibilidades (o su DAFO) decidieron optar por una estrategia reorientadora, con la que cambiar la situación de una manera sutil y paulatina. Pero con la seguridad de que el desenlace estaba en gran parte bajo su control. Aplicaron la CAME.
CAME
La matriz CAME no tiene tanto misterio como Enigma. De hecho, bastará con que recuerdes este esquema:
Corregir __________ Debilidades
Afrontar __________ Amenazas
Mantener __________ Fortalezas
Explotar __________ Oportunidades
Fácil, ¿verdad? Bien, ahora te toca decidir qué estrategia va a ser la más oportuna para tu situación. Igual que hicieron los brillantes criptógrafos de Turing, has de sopesar cuál de las estrategias resultado de la CAME, favorecerá más a tu organización. Para ello, es vital recuperar la Visión de tu organización (pincha aquí para refrescar qué es eso de la visión) y decidir qué estrategia encaja mejor, de forma que queden alineadas.
En el caso de la máquina Enigma, su Visión era ganar la guerra (obvio) manteniendo una posición estratégicamente superior en todo momento. La máquina de computación de Turing les permitía esa superioridad. Pero si hubieran atacado directamente a los alemanes, descubriendo el pastel, hubieran perdido esa posición privilegiada al instante. Y el resto de la historia es mejor ni imaginárselo.
Estrategias ganadoras
De las cuatro combinaciones entre DAFO y CAME surgen los siguientes tipos de estrategias:
- De supervivencia: vale, estás tan mal que poco puedes hacer. Pero ese poco puede salvarte la vida. En este caso, tu objetivo será no empeorar, corrigiendo debilidades y afrontando amenazas. Si estuvieras en una fortaleza, te tocaría reparar el muro en los ratos en los que no tienes enemigos delante que intentan agrandar los agujeros.
- Defensiva: ¿estás seguro de que la mejor defensa es siempre un buen ataque? Prueba con esto. Para mantenerte en la situación actual (no ir a peor, que tampoco estás para tirar cohetes), afronta las amenazas y mantén tus fortalezas. No salgas de tu castillo reparado, pero asegúralo bien frente a los ataques.
- Reorientadora: estás bastante mejor. Pero quieres cambiar tu situación. El muro necesita mantenimiento, así que corrige esas debilidades. Pero un mercader te ha ofrecido un nuevo regimiento de arqueros a cambio de refugio. Aprovecha esa oportunidad.
- Ofensiva: con tu fortaleza reparada y los nuevos arqueros, es momento de salir a explorar el bosque. Dejas a la mitad de los soldados en el castillo, manteniendo las fortalezas. Y con la otra mitad te atreves a salir en busca de nuevas oportunidades, que deberás explotar.
De estas cuatro, debes elegir la que mejor se adapte a tus circunstancias (DAFO) y a lo que quieres conseguir (VISIÓN).
Así que, ¿preparado para dominar tu mundo?
Avísame cuando esté disponible el próximo post.